Hace unas semanas leí el relato corto " Cómo construir una superheroína ", y eso supuso un punto de inflexión en el momento por el que estoy pasando, en tres meses, esa fue la primera vez que fui capaz de concentrarme y poder leer, y disfrutar de lectura.
Parece mentira cómo una de las cosas que más te gustan se hace un mundo cuando no estás bien y se te hace imposible incluso disfrutar con ello.
Al finalizar el relato, la autora anima a que cada persona construya su propia superheroína, y en ello estoy, para intentar ayudarme a superar mis miedos. A mi superheroína quiero nutrirla de rasgos de mujeres de carne y hueso, Mujeres a quiénes admiro y que me merecen un gran respeto.
El primer espejo en quién quiero mirarme es mi Abuela, una mujer con mucho carácter y fuerza, luchadora y con unas increíbles ganas de vivir durante toda su vida. Cómo me gustaría tener sus ganas, su coraje, con más de 80 años, se maquillaba cada día para sentarse en el sofá de casa, no perdonaba el ir a la peluquería cada 15 días. Alma tendrá las ganas de vivir y divertirse de mi abuela Conchita.
El segundo rasgo del que quiero dotar a Alma del carácter luchador de mi Madre, su afán de superación, haber estado al borde de la muerte en varias ocasiones y seguir aquí, no dejándose vencer y luchando cada día por vivir y superarse. Ella es mi segundo espejo.
El tercero de mis espejos es mi Suegra, de ella tendrá su aguante para llevar las cosas, para ser capaz de sacar adelante a su familia, siendo durante años la cabeza visible de la misma, su carácter trabajador y paciencia para superar todo, incluso las pérdidas.
Para Alma también quiero la constancia de mi cuñada Sara, esa que la ha llevado a luchar con uñas y dientes y remover cielo y tierra hasta conseguir lo que mis sobrinas necesitan. De mi hermana Lidya quiero su fuerza y valentía, esa para ser madre de dos luceros aún habiendo pasado por 4 abortos, y también su disposición para cuando se la necesita. Esa lucha, constancia y tesón de ambas son otro espejo.
La sonrisa de mi Alma es la de mi Sister, mi Paqui, esa hermana mayor que me faltaba y he encontrado en Barcelona, y también tendrá su naturalidad sin dobleces, su saber aparecer en los momentos que la necesitas.
También tendrá la Valentía y la Supervivencia de las compañeras y amigas que conocí en AMUVI, esas Mujeres con las que semana tras semana compartía miedos, ansiedad, falta de autoestima y que se convirtieron en otra familia pues era quiénes mejor me entendían, tanto las de mi grupo de terapia como las del siguiente grupo. Con ellas y con la ayuda de Celia y Yolanda empecé a aprender a mirar la vida de frente.
Me gustaría que tuviese la Sabiduría de mis profesoras, aquellas que marcaron y ayudaron en mi educación en las diferentes etapas, en EGB Doña Juanita y Doña Esther, su dureza y rigidez me hizo aprender más de lo que pensaba, en el instituto, sobre todo, Carmen Perez Royo y Rocío Romero, me hicieron amar las lenguas clásicas y me hicieron superarme una y otra vez al exigirme más cada día. La profesora de Física y Química, con quién tuve enfrentamiento pero que me hizo comprender que aunque me llevase palos era mejor ir con la verdad por delante y de cara. En la Universidad, Concha, Alessandra, Laura, Angélica, Fiammetta, Antonella, que influyeron y contribuyeron a formar a la persona, dentro y sobre todo fuera del aula, con sus charlas, con su ayuda... ahí empezó el gran cambio.
Indudablemente, mi superheroína tiene que tener rasgos de mis cangrus, la capacidad para hacer reír cuando más lo necesitas, el respeto cuando alguien está ahogado y quiere desaparecer un tiempo, la capacidad de dar un abrazo y que lo sientas aún en la distancia, el saber que siempre estará ahí cuando se la necesite, el que no haga falta que hables porque ya sabe lo que está pasando. Estos rasgos coinciden en tod@s vosotr@s y sois otro gran espejo en el que mirarme y Amig@s en quiénes apoyarme.
Alma va a tener el corazón de Rosa López, su capacidad para acariciar el alma con su voz o con un abrazo, será capaz de usar su música para calmar el dolor, el miedo, la ansiedad y ayudarte a salir de la oscuridad.
Tendrá la vitalidad de mi Tata, el equilibrio y serenidad de Karen y las manos sanadoras de mi Ángeles y de María José, mi fisio.
La calma, la tranquilidad y la dulzura que desprende Bárbara, su capacidad para transmitir paz no sólo con la acupuntura sino también con sus palabras.
También me gustaría que Alma tuviese la capacidad de escuchar de Carmen Borja, que tantas noches me acompañó a través de su programa de radio, y el don de Sandra Barneda para poder poner las palabras exactas a los sentimientos y expresar lo que muchos sentimos y no somos capaces de decir, su seguridad y su profesionalidad.
Y el último de los espejos y para mí el más importante es el de Laura, la mujer a la que más quiero, de ella mi Alma tendrá su ternura, su sentido del humor, su alegría, ese a veces punto de niña grande que tiene y que me hace reír, su ilusión y sus sueños.
Construir mi superheroína, Alma, me está ayudando a encontrarme de nuevo a mí misma, a analizar muchos sentimientos y mis miedos, pero al mismo tiempo me sirve para daros las Gracias a todas vosotras, a las que os nombro y a las que no, pero que habéis estado o estáis conmigo, que de una forma u otra habéis influido en mi vida, seáis o no conscientes, me habéis marcado en Momentos importantes y habéis contribuido a hacer de mí la mujer que soy ahora.
Cuando me sienta perdida, tiraré de Alma, y con ella, de cada una de vosotras y estoy segura de que me ayudará a encontrarme y a superar los miedos contra los que estoy luchando, voy a vencer y recuperar la sonrisa y la positividad que he perdido. Encontraré vuestras manos que me ayudarán a salir del pozo, porque muchas veces, mi silencio es un Te Necesito.